domingo, 27 de abril de 2008

LA LEYENDA DE LA GUARDIA DE CORPS.

La historia que ahora mismo voy a contar, no es una historia sino una leyenda, y trata de una bella embaucadora que enamora a muchos donjuanes, en noches de luna, y suele acontecer por la calle Sacramento, y uno de ellos fue el capitán Echenique de la guardia de Corps, que también quedó prendado de sus encantos, y esta es su historia. Aconteció una noche de invierno del año 1.745, cuando el capitán Echenique atravesó la calle de Sacramento. En ese mismo instante escucha una dulce voz de mujer que le invita a subir a su casa, y como era de esperar sube respondiendo a su prometedora insunuación. Así el capitán pasa una noche más agradable y placentera que jamás hombre pudo imaginar, en brazos de una mujer, al parecer de una tal hermosura. De pronto las campanas le hacen volver a la realidad, pero cuando sale apresuradamente de allí se acuerda de que se ha dejado olvidado el espadín, pero cuando llama a la puerta, nadie responde y sigue llamando, hasta que el portero le dice que no vive nadie allí y de tanta insistencia al final consiguen entrar en la casa pero cuando entran allí ve para su asombro que la casa está completamente deshabitada, y no acaba ahí la cosa, al entrar en la habitación donde había pasado la noche anterior, se encuentra con una cosa brillante que al parecer es el espadín que se había dejado olvidado. Ante este suceso, se metió en la orden de los franciscanos, y nunca se resolvió el misterio de la casa del milagro, o también llamada de la cruz de palo.

1 comentario:

Antonio Azuaga dijo...

Está mejor el relato, pero le falta alguna observación o conclusión más personales.
En cualquier caso, promete.
Un beso